30 de junio de 2009

El Futuro de la Tierra


El anuncio de una futura colisión entre la Tierra y algún cuerpo celeste, ha sido por años el manantial deinnumerables teorías que en su mayoría, no son más que simples especulaciones.

Sin embargo, sabido es que en el universo existen cientos de desechos y/o asteroides de enormes dimensiones que en un futuro no muy lejano, podrían ingresar a la atmósfera terrestre. Tal es así, que un grupo de astrónomos, reunidos en la ciudad de Tucson, Arizona, discutieron hace unos años la presencia de un enorme "Planeta Frío" ajeno a nuestro sistema solar y que según observaciones telescópicas se acerca a nuestro Planeta.
Como es de suponer, los expertos comenzaron a hacer sus cálculos para corroborar la presencia de este cuerpo, los que efectivamente dieron fe de la existencia de un enorme y oscuro Planeta, de una masa miles de veces más grande que la Tierra y cuyo centro gravitacional resultó ser la estrella Barnard, razón por la cual a este Planeta se le denominó Barnard 1 o Hercólubus, según los espiritistas brasileños.

Para los astrónomos Hercólubus y nuestro Sol poseen una trayectoria a través del espacio relativamente paralela, convergiendo ambas en torno a la denominada estrella Vega, ubicada en la constelación de la Lira. Situación en absoluto descabellada, puesto que según los cálculos este viaje ha venido ocurriendo cada 6.000años, lo que quizás, explicaría muchos de los fenómenos que hemos detallado a lo largo del presente texto.

Al tratar de ubicar en la historia algún acontecimiento que esté ligado al paso de este enorme Planeta, aparece de modo coincidente, la inclinación del eje de rotación de nuestro mundo. Esto debido a que existen pruebas concretas que demuestran que el mencionado eje no siempre estuvo así de inclinado respecto de la eclíptica. Situación que debe haber ocurrido hace unos 6.600 años.
Si tenemos en cuenta que el acercamiento del "Planeta Frío" ocurre cada 6.000 años, no es una locura suponer que en 24.000 años Hercólubus se nos ha acercado en 4 oportunidades, las mismas 4 edades o Yuga-kali, hay las mismas 4 veces en que la Tierra ha sufrido las glaciaciones (una cada 6.000 años aprox.)


Otra explicación del mismo fenómeno la encontramos en la literatura Maya, quienes sostenían que cuando el campo magnético del Sol cambia de dirección tiende a sacar a la Tierra de su eje.
La inclinación de la Tierra está sujeta a terremotos, inundaciones, incendios y erupciones volcánicas.
" El campo magnético del Sol cambia cinco veces cada ciclo cósmico largo. Esta parecía la razón de que los Mayas y otros creyeran que la Tierra había sido destruida 4 veces en el pasado y que la destrucción al comienzo del siglo XXI en ésta, la quinta Era del Sol, seguiría el mismo camino" ( Cotterell, 1995)
Si las catástrofes asociadas al paso de este enorme Planeta frío se han repetido cada cierto tiempo, y con asombrosa exactitud (cada 24 y 26 mil años) no es ninguna locura suponer que los pueblos antiguos hayan asociado este hecho pasado, a posibles profecías futuras.

Obviamente, sucesos de esta índole han dejado en la humanidad enormes huellas que, a la luz de los acontecimientos, parecen estar más cerca de la realidad que de la magia. Sin embargo, y valga una última reflexión oportuna, la intención de quienes han elaborado éste y otros textos similares, no es por mucho causar pánico o terror entre sus lectores. Muy por el contrario, nuestro motivo final es la investigación y constatación empírico-científica de informaciones contenidas en documentos llegados a nuestras manos, los cuales sólo pretenden informar de lo que está sucediendo en el Planeta.

Pensamos, más estamos seguros, de la poca conciencia que existe entre los habitantes de nuestro mundo respecto al grado de transformación que fenómenos celestes ubicados a millones de años luz, pueden provocar a nuestra especie. Transformaciones que ya han comenzado, pero que lamentablemente, dicen relación con la destrucción de nuestro entorno natural.
Queremos que si usted nota que algo de lo que hemos escrito se está cumpliendo, o bien amanece un día sin luz solar y en la más completa oscuridad, por favor no se asuste. Sepa que este proceso durará menos de 5 días.
Esto ya ha sucedido en épocas remotas y ahora sólo estamos cumpliendo un ciclo universal.
Lo que estamos a punto de vivir es la entrada a una nueva y maravillosa experiencia a la que el hombre ha sido llamado a presenciar.

Jet


Es normal que en objetos que tienen disco de acreción haya jets. Los jets son materiales alejándose en ángulo recto al plano del disco de acreción. Ellos se mueven a buen porcentaje de la velocidad de luz, que se mide como un enorme desplazamiento Doppler. La característica que tiene es que a veces se produce un corrimiento al azul y al rojo enorme, al mismo tiempo. Esto es porque un jet apunta a nosotros (corrimiento al azul) y el segundo para el otro lado (corrimiento al rojo). Los mecanismos que generan los jets no esta bien entendido.


Los Quásares


Quásar (Cuásar)

Palabra derivada de la frase Quasi Stellar Object (objeto casi estelar) creada en 1963 para definir una nueva clase de objetos celestes descubiertos en el transcurso de conjuntas observaciones ópticas y radioastronómicas.

Se trata de cuerpos celestes que tienen una apariencia estelar y que, en el telescopio, aparecen como débiles estrellitas; sin embargo, observadas con el radiotelescopio, muestran una emisión energética tan intensa como para ser comparable con la de una galaxia íntegra.

Los quásar muestran también un desplazamiento de las rayas espectrales hacia el rojo tan fuerte que, si este fenómeno tuviera que ser interpretado en términos de Expansión del Universo, ellos deberían estar animados con velocidades próximas a las de la luz y encontrarse en los extremos confines del Universo mismo, a miles de millones de años-luz de nosotros.

El primer quásar fue descubierto por el astrónomo Maarten Schmidt del observatorio de Mount Palomar (California), en 1963. El encontró una pequeñísima estrella cuya posición coincidía con la de una gran fuente de ondas de radio de tipo galáctico. El espectro de esta estrella era sin embargo muy especial: en efecto, mostraba un redshift elevadísimo.

Algunos quásar, visibles ópticamente, muestran, si se fotografían con largas exposiciones, una envoltura de gas alrededor del objeto central.

Hoy en día, los científicos tienden a describir el núcleo de un cuásar como un disco de gas caliente moviéndose en espiral en torno a un agujero negro supermasivo que lo va tragando. Parte de ese gas resulta despedido violentamente hacia afuera en dos chorros con direcciones opuestas, a casi la velocidad de la luz. Los teóricos se esfuerzan por entender la física del disco de acreción y los chorros, mientras que los observadores se esfuerzan en asomarse al corazón del cuásar. El "motor" central que impulsa a los chorros es difícil de estudiar telescópicamente debido a lo muy densa que es la región y a su enorme lejanía de la Tierra.

Radiación Cósmica

La radiación cósmica de fondo es la energía remanente del Big Bang que dio origen al universo. La predicción teórica de esta radiación fue realizada por el físico ruso George Gamow y dos colegas suyos Robert C. Herman y Ralph A. Alpher en 1946.

La radiación cósmica de fondo fue detectada por primera vez por los radioastrónomos Arno Penzias y Robert Wilson en 1964. Es interesante anotar que ya existía evidencia de la RCF 30 años antes del experimento de Penzias y Wilson. Walter Adams y Andrew McKellar habían observado las líneas de emisión resultantes de la excitación producida por la RCF en radical CN que se encuentra en el medio interestelar. Los autores Helge Kragh y Steven Weinberg explican el retardo en el descubrimiento de la RCF resaltando el hecho de que por esos años la cosmología no era tomada en serio. De hecho, los científicos que marginalmente tocaban el tema adoptaban el modelo del Big Bang o el modelo rival cuasi-estacionario guiados no por resultados empíricos sino por inclinación filosófica.

La mayor fuente de información que tenemos sobre el universo temprano es la radiación cósmica de fondo (CBR, por la sigla de “Cosmic Background Radiation”). Sí, la misma radiación cuyas propiedades serán medidas con gran precisión por los instrumentos a bordo del satélite Planck.

Mientras esperamos que el Planck se enfríe hasta convertirse en el punto más frío del universo, y llegue a su destino donde observará el universo haciendo acrobacias para no “caerse” del punto L2, podemos hablar sobre la naturaleza y los atributos de la CBR, la información que ya se ha obtenido y la que se espera obtener, y las consecuencias que esto podría tener para nuestro entendimiento del universo.

Casi toda la información que tenemos sobre el espacio exterior ha llegado a la Tierra como luz visible, ondas de radio, rayos X y gamma, microondas, radiación infrarroja o ultravioleta, etc. Es decir, como alguna forma de radiación electromagnética. Analizando esta radiación hemos sido capaces de aprender sobre la naturaleza del Sol y las estrellas, los planetas, las galaxias y demás astros que pueblan el firmamento. Pero ese no es el final de la historia: hay más radiación, que no proviene de ningún astro, sino de todas partes, del fondo mismo del cielo. Es invisible, pero puede detectarse con la antena adecuada apuntando a cualquier punto del cielo en el que no hay astros, donde creeríamos, ingenuamente, que “no hay nada”.

(A continuación un video del satélite Planck)

El satélite Planck de la NASA detectó anisotropías (o pequeñas desviaciones de la temperatura con respecto al valor promedio) en la radiación cósmica de fondo en 1992. En la gráfica aparece la temperatura de la radiación cósmica de fondo representada por colores (caliente = rojo, frío = azul).

La estructura detectada por Planck da apoyo a la teoría cosmológica del Big Bang ya qué según ésta, las galaxias se formaron a muy temprana edad dejando una huella en la radiación (que corresponden a las anisotropías detectadas por el Planck).



26 de junio de 2009

Los misterios del cosmos


Casi un siglo después de que el físico alemán Victor Hess -montado en un globo que volaba a 5000 metros de altura- detectara una "radiación penetrante" llegada desde el espacio, un equipo de 400 científicos de todo el mundo, en el que cumplieron un papel protagónico investigadores argentinos acaba de resolver el misterio acuciante que sumió a los físicos en una aventura sin fronteras, los llevó a la cima de montañas y a recónditos rincones del globo en su ansia por entender de dónde provienen esas partículas que llamaron "rayos cósmicos de altísimas energías".

La respuesta, según el trabajo firmado por la Colaboración Pierre Auger que hoy merece la tapa de Science , sin duda un honor infrecuente reservado a los hallazgos más originales y de mayor trascendencia, es que estos misteriosos rayos que parecen llegar al planeta de todas partes provienen en realidad de regiones convulsionadas que se encuentran en el centro de galaxias ubicadas en nuestro "vecindario" cósmico, a no más de 300 millones de años luz, donde gigantescos agujeros negros (zonas del universo de tal densidad que ni siquiera la luz puede escapar a su atracción) son capaces de acelerar partículas subatómicas a velocidades cercanas a la de la luz. Los astrofísicos llaman a estas regiones "núcleos activos de galaxias".

"La ciencia es, en cierto modo, una apuesta -dice Alberto Etchegoyen, investigador principal de la Colaboración por la Argentina-. Apostamos a que podíamos identificar la fuente de los rayos cósmicos de altísimas energías y hoy, incluso antes de finalizar la instalación del observatorio, ya tenemos respuestas a algunas de nuestras preguntas y estamos abriendo una nueva ventana al universo, el camino para una astronomía de partículas cargadas."

Agrega Ingo Allekotte, subgerente general del observatorio: "Hasta ahora estudiábamos la radiación electromagnética. La información venía en partículas de luz, visible, de microondas, ultravioleta... Por primera vez miramos una fuente que manda no sólo radiación electromagnética, sino también partículas con masa".

El anuncio del hallazgo científico reunió a la comunidad de Malargüe en el moderno centro de convenciones situado a metros del edificio central del observatorio, con el vicepresidente electo, Julio Cobos, y las "reinas" de la ciudad mendocina sentados en primera fila del auditorio.

Tras la presentación, todos se dieron el gusto de aclarar sus dudas sobre estos extraños fenómenos del universo durante un diálogo espontáneo con algunos de los principales investigadores del estudio.

Cascadas de rayos cósmicos


Las lluvias o cascadas de partículas subatómicas se originan por la acción de los rayos cósmicos primarios, que pueden tener una energía superior a los 1020 eV, es decir, una energía cien millones de veces superior a la que se puede impartir a una partícula subatómica en los más potentes aceleradores construidos hasta hoy.

Cuando un rayo cósmico de alta energía llega a la atmósfera terrestre interactúa con los átomos que la forman, chocando con los gases y liberando electrones. Este proceso excita los átomos y crea nuevas partículas. Estas, a su vez, chocan con otras produciéndose una serie de reacciones nucleares, que originan nuevas partículas que repiten el proceso en cascada. Así puede formarse una cascada con más de 1011 nuevas partículas. Las partículas que forman las cascadas se pueden medir con distintos tipos de Detectores de partículas generalmente basados de la materia o en el Efecto Cherenkov".

Agujeros negros galácticos


Hoy día se cree que la mayoría de las galaxias albergan agujeros negros muy masivos en sus centros, aunque con frecuencia permanecen en un discreto silencio y cuesta detectarlos, como sucede en el caso de nuestra propia Galaxia. Pero en ocasiones los agujeros negros están rodeados por discos de material que cae sobre ellos (discos de acreción). El material que cae se calienta y emite cantidades enormes de radiación: el núcleo activo de una galaxia puede manifestarse entonces como un cuásar.
http://www.astrored.org/enciclopedia/articulos/data/astromia/quasar1.jpg
Un agujero negro muy masivo tiene alrededor un disco de acreción que genera la actividad habitual en los cuásares. Pero cuando un segundo agujero negro, mucho más ligero, orbita alrededor del otro y choca con el disco de acreción dos veces en cada órbita, y estos impactos desencadenan los pulsos casi periódicos.

La universidad de Turku, Finlandia, ha analizado en detalle el comportamiento de estos sistemas y galaxias supermasivos. Al cronometrar los cambios de brillo a lo largo de muchos años han logrado trazar la órbita del agujero negro pequeño, y este método permite evaluar con precisión la masa del agujero negro central.

Comportamiento de un Blazar


Un blazar es una fuente de energía muy compacta y altamente variable situada en el centro de una galaxia. Los blázares están entre los fenómenos más violentos del Universo y son un tema importante en la astronomía extragaláctica.

Los blázares son miembros de un grupo más grande de galaxias activas, también llamados Núcleos Activos Galácticos (AGN). Sin embargo, no son un grupo homogéneo y pueden ser divididos en dos grupos de galaxias:

- Cuásares altamente variables, a veces llamados cuásares Variables Ópticamente Violentos (OVV), estos son un subconjunto pequeño de todos los cuásares.

- Objetos BL Lacertae (objetos "BL Lac" o simplemente "BL Lacs"). Algunos de estos extraños objetos pueden ser blázares intermedios, los cuales parecen tener una mezcla de las propiedades de ambos.

El cuadro generalmente aceptado de estos quasares OVV es que son, intrínsecamente, potentes radiogalaxias, mientras que los objetos BL Lac son, básicamente, galaxias de fuentes de radio débil. En ambos casos, los centros galácticos son de galaxias gigantes elípticas.

La galaxia PKS 2155-304 es un blazar


Un equipo internacional de astrofísicos usando telescopios terrestres y espaciales han descubierto sorprendentes cambios en la radiación emitida por una galaxia activa. La descripción que surge a partir de estas primeras observaciones simultáneas con telescopios ópticos, de rayos-X y de última generación de rayos gamma es mucho más compleja de lo que los científicos esperaban y desafía a las actuales teorías de cómo se genera la radiación.

La galaxia en cuestión es PKS 2155-304, un tipo de objeto conocido como “blazar”. Como muchas otras galaxias activas, un blazar emite chorros de partículas dirigidos en sentidos opuestos que viajan casi a la velocidad de la luz cuando la materia cae en el agujero negro supermasivo central; este proceso no es bien comprendido. En el caso del blazar, la galaxia está orientada de tal forma que observamos justo el chorro.

PKS 2155-304 está situado a 1500 millones de años luz de distancia en la constelación de Piscis Austrinus y es una fuente normalmente detectable pero débil de rayos gamma. Pero cuando el chorro sufre un gran estallido, como sucedió en 2006, la galaxia puede convertirse en una de las fuentes más brillantes del cielo en las energías de rayos gamma que los científicos pueden detectar – más de 50 billones de veces la energía de la luz visible. Incluso a partir de estas potentes fuentes, sólo aproximadamente un rayo gamma de esta energía impacta en un metro cuadrado de la parte superior de la atmósfera cada mes.


Los rayos gamma de energías más bajas fueron detectados directamente por el Telescopio de Gran Área (LAT) a bordo del Telescopio Espacial de Rayos Gamma Fermi de la NASA. “El lanzamiento de Fermi nos da la posibilidad de medir esta potente galaxia a través de tantas longitudes de onda como es posible por primera vez”, dice Werner Hofmann, portavoz del equipo H.E.S.S. en el Instituto Max Plack para Física Nuclear en Heidelberg, Alemania.

Con el régimen de rayos gamma totalmente cubierto, el equipo se volvió hacia los satélites Swift y Exporador Sincrónico de rayos-X Rossi (RXTE) de la NASA para proporcionar datos de las emisiones de rayos-X en la galaxia. Para terminar de afinar la cobertura de longitudes de onda estaba el Telescopio Automático para Monitorización Óptica H.E.S.S., el cual registró la actividad de la galaxia en luz visible.

Entre el 25 de agosto y el 6 de septiembre de 2008, los telescopios monitorizaron a PKS 2155-304 en su estado tranquilo sin llamaradas. Los resultados de la campaña de 12 días fueron sorprendentes. Durante los episodios de llamaradas de este y otros blazars, las emisiones de rayos-X y gamma suben y bajan juntos. Pero esto no sucede así cuando PKS 2155-304 está en su estado tranquilo – y nadie sabe por qué.

Lo que es aún más extraño es que la luz visible de la galaxia sube y baja con la emisión de rayos gamma. “Es como observar un soplete donde las temperaturas máxima y mínima cambian de golpe, pero las temperaturas intermedias no”, dice Berrie Giebels, astrofísico de la Escuela Politécnica de Francia que trabajó con los equipos de LAT Fermi y H.E.S.S..

“Los astrónomos están aprendiendo que los distintos constituyentes de los chorros en el blazar interactúan de forma bastante compleja para producir la radiación que observamos”, dice el miembro del equipo Fermi Jim Chiang de la Universidad de Stanford en California. “Estas observaciones pueden contener las primeras pistas que nos ayuden a desentrelazar lo que realmente está pasando en el corazón de un blazar”.

En el corazón de una galaxia activa, la materia que cae dentro de un agujero negro supermasivo, de alguna forma crea chorros de partículas que viajan casi a la velocidad de la luz. Para las galaxias activas clasificadas como blazars, uno de estos chorros se dirige directamente hacia la Tierra.

25 de junio de 2009

Ajugeros negros super masivos


http://www.infoastro.com/img/20080417oj287.jpg
OJ 287 es un agujero negro en la constelación de Cáncer, que tiene girando a su alrededor otro objeto similar. Su evolución orbital confirmaría una de las predicciones más enigmáticas de la teoría de la relatividad de Einstein: la emisión de ondas gravitatorias.


Se acaba de confirmar el carácter binario de OJ 287, un agujero negro muy masivo en el centro de una galaxia muy lejana en la constelación de Cáncer. Un agujero negro central con una masa igual a la de 18 000 millones de soles tiene girando a su alrededor otro objeto similar pero menos masivo, y la interacción del sistema con su entorno induce cambios de brillo que han permitido estudiar la evolución de la órbita.


Esta evolución la domina una de las predicciones más enigmáticas de la teoría de la relatividad general de Einstein: la emisión de ondas gravitatorias. Esta confirmación espectacular de la teoría centenaria de Einstein se acaba de publicar en la revista "Nature", y Calar Alto ha contribuido al descubrimiento con la dedicación de su personal, sus telescopios y sus instrumentos.

24 de junio de 2009

Saturno


Saturno es el sexto planeta desde el Sol y el segundo más grande del sistema solar con un diámetro ecuatorial de 119.300 kilómetros. Está claramente achatado en los polos, como resultado de la rápida rotación del planeta alrededor de su eje. Su día dura 10 horas, 39 minutos y tarda 29,5 años terrestres en completar su órbita alrededor del Sol. La peculiaridad más conocida de Saturno es la de estar rodeado de un sistema de anillos, descubierto en 1610 por Galileo utilizando uno de los primeros telescopios. Galileo no comprendió que los anillos estuvieran separados del cuerpo central del planeta, así que los describió como "asas".

Fue el astrónomo holandés Christiaan Huygens el primero en describirlos correctamente. En 1655, para no perder su derecho de prioridad mientras verificaba sus propuestas, Huygens escribió un anagrama que, cuando se ordenaba, formaba una sentencia latina cuya traducción dice así: "Está circundado por un delgado anillo achatado, inclinado hacia la eclíptica y sin tocar en ningún punto al planeta". Los anillos, que se nombraron por el orden en que se descubrieron, se conocen como los anillos D, C, B, A, F, G y E. Hoy se sabe que contienen más de 100.000 pequeños anillos, todos ellos girando en torno al planeta.

El viento sopla a grandes velocidades en Saturno. Cerca del ecuador, alcanza velocidades de 500 metros por segundo. El viento sopla principalmente hacia el este. Los vientos más fuertes se encuentran cerca del ecuador y su velocidad disminuye uniformemente a medida que nos alejamos de él. A latitudes por encima de los 35 grados, los vientos alternan su dirección de este a oeste según aumenta la latitud.

El color amarillo del nuboso Saturno está marcado por anchas bandas atmosféricas similares, pero más tenues, que las encontradas en Júpiter. Desde la Tierra, se puede apreciar su color, debido a que es uno de los más brillantes en el cielo nocturno. Observado a través de un telescopio, los anillos A y B se ven fácilmente, mientras que los D y E sólo se ven en condiciones atmosféricas óptimas. Telescopios de gran sensibilidad situados en la Tierra han detectado nueve satélites, y en la niebla de la envoltura gaseosa de Saturno se distinguen pálidos cinturones y estructuras de bandas paralelas al ecuador.

Tres naves espaciales estadounidenses han incrementado enormemente el conocimiento del sistema de Saturno. La sonda Pioneer 11 fue lanzada en septiembre de 1979, seguida por el Voyager 1 en noviembre de 1980 y el Voyager 2 en agosto de 1981. Estas naves espaciales llevaban cámaras e instrumentos para analizar las intensidades y polarizaciones de la radiación en las regiones visible, ultravioleta, infrarroja y de radio del espectro electromagnético. Estas naves también estaban equipadas con instrumentos para el estudio de los campos magnéticos y para la detección de partículas cargadas y granos de polvo interplanetario.

En octubre de 1997 fue lanzada la nave Cassini, que deberá entró en órbita de Saturno en el año 2004. Se trata del último proyecto de gran presupuesto de la NASA, en colaboración con la Agencia Espacial Europea y la Agencia Espacial Italiana. La Cassini recogerá datos sobre Saturno y sus satélites durante cuatro años. Algunos meses después de alcanzar la órbita del planeta, la nave dejará caer una sonda (Huygens) sobre la superficie de Titán, la mayor y más interesante de sus lunas.


Interior
Saturno es el único planeta cuya densidad es inferior a la del agua (aproximadamente un 30% menos). Si fuese posible encontrar un océano lo suficentemente grande, Saturno flotaría en él. Además, su densidad media es una octava parte de la de la Tierra, debido a que el planeta está compuesto fundamentalmente de hidrógeno. El enorme peso de la atmósfera de Saturno hace que la presión atmosférica aumente con rapidez hacia el interior, donde el hidrógeno se hace líquido. Hacia el centro del planeta el hidrógeno líquido se condensa en hidrógeno metálico, que es un conductor eléctrico. Las corrientes eléctricas presentes en este hidrógeno metálico son las responsables del campo magnético del planeta. En el centro de Saturno se han consolidado, probablemente, elementos pesados formando un pequeño núcleo rocoso a una temperatura cercana a los 15.000 ° C. Tanto Jupiter como Saturno siguen asentándose por la gravitación, siguiendo su original acreción de la nebulosa de gas y polvo de la que se formó el sistema solar hace más de 4.000 millones de años. Esta contracción genera calor, haciendo que Saturno lo irradie en el espacio en una proporción tres veces mayor que la que recibe del Sol.


Atmósfera

La atmósfera está básicamente compuesta por hidrógeno (88% en masa) y el helio (11%); el resto comprende trazas de metano, amoníaco, cristales de amoníaco y otros gases, como etano, acetileno y fosfina. Las imágenes del Voyager mostraron remolinos y corrientes turbulentas de nubes que tenían lugar a gran profundidad en una niebla mucho más densa que la de Júpiter debido a la menor temperatura de Saturno. Las temperaturas de la parte superior de la nube de Saturno están cercanas a -176 ° C, unos 27 ° C más bajas que las de Júpiter en los mismos puntos.

En 1988, a partir del estudio de las fotografías del Voyager, los científicos determinaron un elemento atmosférico extraño alrededor del polo norte de Saturno. Lo que podría ser una configuración de onda estacionaria, reproducida seis veces alrededor del planeta, hace que parezca que las bandas de nubes, a cierta distancia del polo, forman un hexágono enorme y permanente.

Las primeras formas de vida


Hijos del agua

Las primeras manifestaciones de lluvia ocurrieron en nuestro Planeta cuando habían transcurrido unos 300 millones de años después de su formación. La Tierra era muy caliente debido a la gran actividad volcánica y a lo denso de la Atmósfera. Así , los charcos que se formaron eran de agua caliente lo que creaba un ambiente ideal para la proliferación de las primeras bacterias unicelulares que se desarrollaron masivamente bajo el agua.




(7 de marzo de 1930-20 de mayo del 2007)

En el año 1952, un científico norteamericano llamado Stanley Millar decidió demostrar al mundo que la vida había nacido a partir de la materia. Para esto simuló las condiciones en que se encontraba el medio ambiente al momento del nacimiento de las primeras bacterias.

De esta manera depositó en un tubo de ensayo agua ácida tibia, imitando el agua de los charcos. También agregó gases de Metano, de Amoniaco, de Carbono y Oxígeno, simulando a la atmósfera de la época. Luego, sometió al tubo de ensayo a descargas eléctricas para simular relámpagos y… a esperar.


Grande fue la sorpresa

Al cabo de siete días el tubo se tiñó de una sustancia rojiza denominada Aminoácidos que son los elementos constitutivos de toda célula, al igual que los ladrillos son para una casa.

El milagro había ocurrido, pero solo en parte. Estos elementos no constituyen la vida en sí, pero son parte importante de ella.

Para que el experimento hubiera tenido un éxito total, además de los aminoácidos, deberían haberse formado Proteínas y Ácido Nucleico. Si así hubiera sido, podríamos afirmar que fue posible haber “fabricado vida ” a partir de la materia.

Viejas Tierras


Hace unos 200 millones de años todos los continentes estaban juntos, bien pegados unos con otros. Este continente único se llamó Pangea y sus habitantes fueron los dinosaurios. A partir de ese momento se comenzaron a separar a una velocidad de 10 centímetros por año y aún continúan alejándose unos de otros. Este fenómeno se continuará produciendo mientras la Corteza Terrestre flote sobre el Magma que es un líquido.


Sólo chimeneas

En los primeros años la actividad volcánica era enorme y el Planeta estaba repleto de unas especies de chimeneas (volcanes) que arrojaban lava y gases sin cesar. De esta manera se fue formando la corteza terrestre, haciéndose cada vez más gruesa y por tanto, aislando a la superficie del Planeta de las capas inferiores cuya temperatura era de varios miles de grados. Los gases que arrojaban los volcanes quedaban suspendidos en el espacio exterior flotando sobre la corteza terrestre desde donde no podían escapar debido a la fuerza de gravedad de la Tierra.


Un mundo tóxico

En sus primeros años la Atmósfera se componía de gases de Nitrógeno, Carbono, Hidrógeno y Oxígeno, todos ellos provenientes de las capas inferiores de la Tierra que emergían a través de los volcanes, situación que continúa produciéndose hasta ahora. Los gases que componían la Atmósfera no permitían la existencia de la vida ya que eran extremadamente tóxicos y de altas temperaturas, lo que creaba un ambiente opaco, no permitiendo el paso de los rayos del sol con facilidad.


La caldera se enfría

Transcurridos algunos millones de años la corteza terrestre se engrosó y se enfrío bajo los cien grados centígrados, situación que permitió que la temperatura de los gases que conformaban la Atmósfera también se enfriara. Así, las grandes nubes tóxicas que flotaban sobre la corteza terrestre comenzaron a producir lluvia ácida cuyas gotas alcanzaron la superficie de la Tierra formándose los primeros charcos y ríos, los que posteriormente darían lugar a los océanos.


La vida cambió a la atmósfera

Las primeras manifestaciones de vida se produjeron en los charcos, en los ríos y en los mares donde nacieron las primeras algas microscópicas pertenecientes al reino vegetal. Estas algas, al igual como ocurre con las plantas hoy en día, respiraban los gases tóxicos de la Atmósfera y entregaban Oxígeno al medio ambiente.

Así, lentamente la Atmósfera comenzó a purificarse y a transformarse, eliminando los gases tóxicos pasando a ser sólo una mezcla de Oxígeno y Nitrógeno como la conocemos en la actualidad. La vida.

Para el científico inglés de fines del siglo XVll, Charles Darwin, la vida se inició en nuestro planeta como una evolución natural de la materia. Para otros, la vida vino del espacio exterior en un asteroide o en un cometa. Mientras que para otros la vida es de origen divino y las diferentes creencias así lo avalan.


(12 de febrero de 1809-19 de abril de 1882)

23 de junio de 2009

Formación de la Tierra


La Formación de la Tierra

La Tierra se formó hace unos 4.650 millones de años, junto con todo el Sistema Solar. Aunque las piedras más antiguas de la Tierra no tienen más de 4.000 millones de años, los meteoritos y cometas, que se corresponden geológicamente con el núcleo de la Tierra, dan fechas de unos 4.500 millones de años, y la cristalización del núcleo y de los cuerpos precursores de los meteoritos, se cree que ocurrió al mismo tiempo, unos 150 millones de años después de formarse la Tierra y el Sistema Solar. Después de condensarse a partir del polvo cósmico y del gas mediante la atracción gravitacional, la Tierra era casi homogénea y bastante fría. Pero la continuada contracción de materiales y la radiactividad de algunos de los elementos más pesados hizo que se calentara. Después, comenzó a fundirse bajo la influencia de la gravedad, produciendo la diferenciación entre la corteza, el manto y el núcleo, con los silicatos más ligeros moviéndose hacia arriba para formar la corteza y el manto y los elementos más pesados, sobre todo el hierro y el níquel, cayendo hacia el centro de la Tierra para formar el núcleo.
Al mismo tiempo, la erupción de los numerosos volcanes, provocó la salida de vapores y gases volátiles y ligeros. Algunos eran atrapados por la gravedad de la Tierra y formaron la atmósfera primitiva, mientras que el vapor de agua condensado formó los primeros océanos.

La Tierra está formada por una capa superficial dura que se denomina corteza terrestre. Sobre ella están los continentes y los mares que a su vez albergan la vida vegetal y animal. Esta corteza está dividida en 25 partes denominadas Placas Tectónicas que se mueven unas respecto de otras. Así es como la fisonomía de la Tierra fue cambiando con el paso del tiempo.


El interior de la Tierra

Inmediatamente debajo de la corteza está el Magma que es una sustancia líquida y viscosa formada por minerales de los más variados tipos. Debido a la alta temperatura en que se encuentra, su estado sólo puede ser líquido y gaseoso. Ningún elemento conocido puede permanecer en estado sólido sobre los tres mil grados, a menos que la presión sea muy elevada.

El centro de la Tierra

El centro de la Tierra está formado por un núcleo sólido de Hierro y otros minerales pesados a una temperatura del orden de los 5.000 grados centígrados. La presión a esas profundidades es tan grande que los minerales en esas condiciones pueden permanecer en estado sólido. El centro de la Tierra está a 6.340 kilómetros de la superficie.

La corteza de la Tierra es como un bote

La Corteza Terrestre tiene un espesor promedio de 16 kilómetros . La corteza que sustenta a los continentes es más gruesa y puede llegar a ser de 100 Km . de espesor. Bajo los mares es mucho más delgada y puede tener menos de seis kilómetros. Así, las Placas Tectónicas que conforman la Corteza Terrestre flotan sobre el Magma y se desplazan sobre él como si fueran botes en el agua.

La estructura de la Tierra


La corteza del planeta Tierra está formada por placas que flotan sobre el manto, una capa de materiales calientes y pastosos que, a veces, salen por una grieta formando volcanes.

La densidad y la presión aumentan hacia el centro de la Tierra. En el núcleo están los materiales más pesados, los metales. El calor los mantiene en estado líquido, con fuertes movimientos. El núcleo interno es sólido.

Las fuerzas internas de la Tierra se notan en el exterior. Los movimientos rápidos originan terremotos. Los lentos forman plegamientos, como los que crearon las montañas.

El rápido movimiento rotatorio y el núcleo metálico generan un campo magnético que, junto a la atmosfera, nos protege de las radiaciones nocivas del Sol y de las otras estrellas.

Capas de la Tierra

Desde el exterior hacia el interior podemos dividir la Tierra en cinco partes:

  • Atmósfera: Es la cubierta gaseosa que rodea el cuerpo sólido del planeta. Tiene un grosor de más de 1.100 km, aunque la mitad de su masa se concentra en los 5,6 km más bajos.




  • Hidrosfera: Se compone principalmente de océanos, pero en sentido estricto comprende todas las superficies acuáticas del mundo, como mares interiores, lagos, ríos y aguas subterráneas. La profundidad media de los océanos es de 3.794 m, más de cinco veces la altura media de los continentes.



  • Litosfera: Compuesta sobre todo por la corteza terrestre, se extiende hasta los 100 km de profundidad. Las rocas de la litosfera tienen una densidad media de 2,7 veces la del agua y se componen casi por completo de 11 elementos, que juntos forman el 99,5% de su masa. El más abundante es el oxígeno, seguido por el silicio, aluminio, hierro, calcio, sodio, potasio, magnesio, titanio, hidrógeno y fósforo. Además, aparecen otros 11 elementos en cantidades menores del 0,1: carbono, manganeso, azufre, bario, cloro, cromo, flúor, circonio, níquel, estroncio y vanadio. Los elementos están presentes en la litosfera casi por completo en forma de compuestos más que en su estado libre.

La litosfera comprende dos capas, la corteza y el manto superior, que se dividen en unas doce placas tectónicas rígidas. El manto superior está separado de la corteza por una discontinuidad sísmica, la discontinuidad de Mohorovicic, y del manto inferior por una zona débil conocida como astenosfera. Las rocas plásticas y parcialmente fundidas de la astenosfera, de 100 km de grosor, permiten a los continentes trasladarse por la superficie terrestre y a los océanos abrirse y cerrarse.




  • Manto: Se extiende desde la base de la corteza hasta una profundidad de unos 2.900 km. Excepto en la zona conocida como astenosfera, es sólido y su densidad, que aumenta con la profundidad, oscila de 3,3 a 6. El manto superior se compone de hierro y silicatos de magnesio como el olivino y el inferior de una mezcla de óxidos de magnesio, hierro y silicio.



  • Núcleo: Tiene una capa exterior de unos 2.225 km de grosor con una densidad relativa media de 10. Esta capa es probablemente rígida y su superficie exterior tiene depresiones y picos. Por el contrario, el núcleo interior, cuyo radio es de unos 1.275 km, es sólido. Ambas capas del núcleo se componen de hierro con un pequeño porcentaje de níquel y de otros elementos. Las temperaturas del núcleo interior pueden llegar a los 6.650 °C y su densidad media es de 13.

El núcleo interno irradia continuamente un calor intenso hacia afuera, a través de las diversas capas concéntricas que forman la porción sólida del planeta. La fuente de este calor es la energía liberada por la desintegración del uranio y otros elementos radiactivos. Las corrientes de convección dentro del manto trasladan la mayor parte de la energía térmica de la Tierra hasta la superficie.


La Tierra


Es nuestro planeta y el único habitado. Está en la ecosfera, un espacio que rodea al Sol y que tiene las condiciones necesarias para que exista vida.

La Tierra es el mayor de los planetas rocosos. Eso hace que pueda retener una capa de gases, la atmósfera, que dispersa la luz y absorbe calor. De día evita que la Tierra se caliente demasiado y, de noche, que se enfríe.

Siete de cada diez partes de la superficie terrestre están cubiertas de agua. Los mares y océanos también ayudan a regular la temperatura. El agua que se evapora forma nubes y cae en forma de lluvia o nieve, formando rios y lagos. En los polos, que reciben poca energía solar, el agua se hiela y forma los casquetes polares. El del sur és más grande y concentra la mayor reserva de agua dulce.

La Tierra no es una esfera perfecta, sino que tiene forma de pera. Cálculos basados en las perturbaciones de las órbitas de los satélites artificiales revelan que el ecuador se engrosa 21 km; el polo norte está dilatado 10 m y el polo sur está hundido unos 31 metros.

Datos básicos La Tierra Orden
Tamaño: radio ecuatorial 6.378 km.
Distancia media al Sol 149.600.000 km. 3º.
Dia: periodo de rotación sobre el eje 23,93 horas 5º.
Año: órbita alrededor del Sol 365,256 dias 3º.
Temperatura media superficial 15 º C 7º.
Gravedad superficial en el ecuador 9,78 m/s2 5º.



Magnetismo de la Tierra

El magnetismo terrestre significa que la Tierra se comporta como un enorme imán. El físico inglés William Gilbert fue el primero que lo señaló, en 1600, aunque los efectos del magnetismo terrestre se habían utilizado mucho antes en las brújulas primitivas.

La Tierra está rodeada por un potente campo magnético, como si el planeta tuviera un enorme imán en su interior cuyo polo sur estuviera cerca del polo norte geográfico y viceversa. Por paralelismo con los polos geográficos, los polos magnéticos terrestres reciben el nombre de polo norte magnético y polo sur magnético, aunque su magnetismo real sea opuesto al que indican sus nombres.

El polo norte magnético se sitúa hoy cerca de la costa oeste de la isla Bathurst en los Territorios del Noroeste en Canadá. El polo sur magnético está en el extremo del continente antártico en Tierra Adelia.

Las posiciones de los polos magnéticos no son constantes y muestran notables cambios de año en año. Las variaciones en el campo magnético de la Tierra incluyen el cambio en la dirección del campo provocado por el desplazamiento de los polos. Esta es una variación periódica que se repite cada 960 años. También existe una variación anual más pequeña.

22 de junio de 2009

Hercólubus


Hercólobus, el planeta rojo, también llamado Ajenjo o Barnard1, este último nombre dado por su descubridor, un astrónomo llamado Barnard del que hasta el momento no tenemos ninguna información. El planeta Hercólobus es un gigante con un tamaño unas 6 veces mayor que el de Júpiter, perteneciente al sistema Tylo o Tyler, y cuya órbita alrededor de su sol dura unos 35.000 años.


La órbita de Hercólobus llega en un punto a situarse a aproximadamente 500.000 Kilómetros de la Tierra, o puede que incluso algo menos. El peligro de colisión es en teoría nulo, ya que las orbitas planetarias no llegan a cruzarse. ¿Pero, que consecuencias puede acarrear la aproximación a la Tierra, de un planeta de tan colosales dimensiones? Según hemos podido comprobar, las consecuencias serían sin duda bastante desastrosas. Se conocen supuestamente cuatro aproximaciones anteriores (por supuesto en intervalos de 35.000 años), todas ellas ligadas a grandes extinciones o a enormes cambios climáticos. Se dice que fue el causante de la extinción de los dinosaurios e incluso que en su última aproximación desvió el eje de la Tierra a su estado actual e invirtió su sentido de rotación.



La Revolución de los ejes de la tierra se apresurara violentamente, lo que es polo será ecuador y parte del ecuador serán los polos.


El magnetismo de este planeta despertara los volcanes inactivos, atraerá el fuego del centro de la tierra, haciendo que los volcanes entren en erupción y provocando de esta forma los terremotos en cadena.

Muchas super metrópolis como París, Roma, New York, Moscú, desaparecerán de acuerdo a su peso en la Ley del Karma, las pequeñas ciudades entraran en crisis social, cultural y económica con los éxodos de personas que como bestias buscaran refugio.


En algunos países con armas y centros nucleares estarán en emergencia. Muchos virus inactivos saldrán a gobernar en el caos humano. Enfermedades olvidadas surgirán causando desconcierto en el terreno científico. Mutaciones de animales de laboratorios tomarán las calles y avenidas, solo con los Poderes de los Altos Iniciados se les podrá combatir. En teoría el 11 de Agosto de 1.999, coincidiendo con el último eclipse del milenio, Hercólobus llegará a ese punto tan cercano a nuestro planeta, y según la información que hemos podido recabar, esta aproximación volverá a enderezar el eje planetario (o lo desviará aún más) y volverá a invertir el sentido de rotación terrestre. En días pasados, hemos encontrado el extracto de una nota que, de ser auténtico, representaría el único documento astronómico que poseemos respecto a la existencia de Hercólobus, se trata de un informe enviado por el astrónomo chileno Carlos Muñoz Ferrada a Brian Marsden del Smithsonian Center de la Universidad de Harvard.


Y, al mismo tiempo, el suscrito ha incluido los cálculos, ilustraciones, posiciones siderales, que también los calculó, y los dio a conocer el 11 de junio de 1.940, de la lenta penetración al sistema solar, de una nueva y brillante masa cósmica que se aproxima a La Tierra, de un gigantesco Cometa Planeta (que tiene órbita elíptica como cometa y de gran masa como planeta), de altas vibraciones, pesado, gran campo electromagnético como tres veces al que tiene el planeta Júpiter, alta velocidad, viene vertical a la elíptica terrestre y que viaja en sentido directo en órbita elíptica en el tiempo de 13.333.3 años, 133.3 siglos, entre nuestro Sol y un Sol Negro de una estrella lejana moribunda que está a 32 billones de kms.


Que este gran astro que viene penetrando tiene gran excentricidad de 0.99999 y un movimiento medio angular de 0.0000739 por día; que al mismo tiempo: 12 conjunciones medio angular de los grandes planetas nuevos y lejanos: X más XI con sus perturbaciones gravitacionales en órbitas excéntricas equivalen a un ciclo completo de 13.333.3 años igual (1125.6 x 12) 173.9 años del Cometa Planeta de gran masa y campo electromagnético.

Este gran astro que se está acercando, con velocidad uniformemente acelerada, pronto debe ser localizado cerca del Polo Norte, al norte de la Corona Boreal, en toda la Osa menor, en las coordenadas siderales ecuatoriales con una ascensión recta igual a 15 h. 15 m. y una declinación igual más 67º20' norte. Y que el jueves 11 de agosto de 1999, DC., es decir, dentro de 15 años a contar desde 1984, este astro que brillará hasta de día; en esta fecha estará en conjunción: Sol Cometa Luna Tierra, a las 11 h. 22 m. del tiempo universal. Al mismo tiempo, será el día del gran eclipse total del Sol rojizo. En esos instantes, este misterioso astro estará en perigeo a sólo 10.5 millones de kms. de la tierra.


El planeta Hercólobus es conocido también como el Planeta X , Décimo Planeta, Planeta Nibiru. En 1987 la NASA anunció oficialmente la "posibilidad" de la existencia del Planeta X, como reportado en la revista Newsweek del 13 Julio 1987

Este astro veloz pasará por dentro de la órbita de la tierra con una velocidad parabólica de 66 kms. por segundo, y al mismo tiempo, en esa fecha, su perihelio a sólo 139.1 millones de kms. del Sol.

20 de junio de 2009

Los Cometas

¿De donde provienen los Cometas?

Pocas apariciones cósmicas han inspirado tanto respeto y temor como los cometas. El particularmente llamativo cometa Halley, cuya última aparición en el sistema solar interno fue en 1986, aparece en el Talmud "como una estrella que aparece una vez cada setenta años". En 1066, la aparición del cometa fue vista como un portento de fatalidad antes de la Batalla de Hastings.


La ciencia moderna adopta una visión más medida. Cometas como el Halley son aglomeraciones de hielo y polvo que orbitan el Sol en órbitas muy elípticas, adquiriendo sus espectaculares colas en el viento de partículas cargadas que provienen del Sol. Incluso se conoce su fuente: son objetos del Cinturón de Kuiper, remolcados de sus órbitas por Neptuno y Urano.


Pero hay un problema. Ciertos cometas, como Hale-Bopp, que pasó por nuestro vecindario en 1997, aparecen muy infrecuentemente en nuestro cielo. Sus órbitas deben ser muy largas, demasiado como para originarse en el Cinturón de Kuiper. Los astrónomos creen que el sistema solar está rodeado en todas direcciones por un tenue halo de cuerpos helados, expulsados de la vecindad inmediata del sol hace miles de millones de años por la gravedad de los planetas gigantes.


Esta "Siberia cósmica" es conocida como Nube de Oort, en honor al astrónomo holandés Jan Oort, que propuso su existencia en 1950. Esta difusa esfera de material nunca ha sido vista. Y si buscar el planeta X es difícil, la búsqueda de la Nube de Oort es una pesadilla. Se encontraría muy lejos, sería muy difusa y sus piezas demasiado pequeñas para ser vista por los telescopios.



Recientemente, los astrofísicos Daniel Babich y Avi Loeb del Centro Harvard-Smithsonian dicen que podrían ser capaces de detectar la nube al estudiar la radiación de fondo de microondas: la radiación que baña el espacio uniformemente dejada por "la Gran Explosión".
Otros misterios permanecen. El número y trayectorias de los cometas de largo período vistos hasta ahora sugieren que la Nube contendría trillones de objetos de un kilómetro de diámetro o mayores, con una masa combinada varias veces la de la Tierra. Esto es más material del que las actuales ideas acerca de la formación del sistema solar pueden explicar, lo que signfica que nuestros modelos deberían ser revisados, según indica Levison.

Los Cometas


El bombardeo pesado tardío del sistema solar interior

Los planetas del sistema solar interior sufrieron dos períodos devastadores de bombardeo asteroidal. Las causas del primero de ellos parecen bastante claras, pero recién ahora estamos desentrañando las causas y efectos del segundo.

Científicos japoneses y de la Universidad de Arizona están convencidos de que la evidencia que han obtenido decide de una vez por todas las discusiones de décadas acerca de los objetos que bombardearon al sistema solar primitivo en un cataclismo ocurrido hace unos 3 900 millones de años.

Objetos del antiguo cinturón de asteroides idénticos en tamaño a los asteroides actuales del cinturón Marte-Júpiter (no cometas) martillaron los planetas rocosos interiores en una catástrofe única que duró un parpadeo de tiempo geológico (entre 20 y 150 millones de años), según informan los investigadores en el número del 16 de setiembre de la revista Science.

Sin embargo, los objetos de este tamaño que han estado golpeando nuestro sistema solar interior después del así llamado Bombardeo Pesado Tardío, pertenecen a una población completamente diferente, dicen el Profesor Emérito de la UA Robert Strom y sus colegas en el artículo “El origen de los impactadores planetarios en el sistema solar interior” ("The Origin of Planetary Impactors in the Inner Solar System").

Luego de que finalizara el período del Bombardeo Pesado Tardío (o Cataclismo Lunar), han sido principalmente los asteroides cercanos a la Tierra (NEAs = Near Earth Asteroids) los que han salpicado la región terrestre.

Durante los últimos 35 años, Strom ha estado estudiando el tamaño y la distribución de los cráteres por todo lo largo de las superficies del sistema solar. Desde hace tiempo ha sospechado que las responsables por los cráteres que se observan en el sistema solar interior pertenecen a dos diferentes poblaciones de proyectiles. Pero hasta ahora ha habido muy pocos datos como para probarlo.

Ahora las inspecciones asteroidales llevadas a cabo por la Vigilancia Espacial de la Universidad de Arizona, la Inspección Digital Sloan del Cielo, el telescopio japonés Subaru, y otras similares, han acumulado datos bastante completos sobre los asteroides de hasta un tamaño mínimo de algo menos de un kilómetro. De pronto, se hizo posible comparar los tamaños de los asteroides con el tamaño de los proyectiles que crearon los cráteres en las superficies que se encentran desde Marte hasta Mercurio.

“Cuando derivamos los tamaños de los proyectiles a partir del registro de cráteres utilizando leyes escalares, los tamaños más antiguos y más recientes de proyectiles se correspondían con las poblaciones más antiguas y las más jóvenes de asteroides”, dijo Strom. “Es una correspondencia asombrosa”.

“Una de las cosas que ésto nos dice es que la distribución de tamaños actual de los objetos en el cinturón de asteroides fue establecida hace al menos 4 000 millones de años”, dijo el científico planetario de la Universidad de Arizona Renu Malhotra, uno de los co-autores del artículo de Science, dijo: “Otra cosa que nos dice es que el mecanismo que causó el Bombardeo Pesado Tardío fue un evento gravitatorio que barrió objetos desde el cinturón de asteroides, sin importar el tamaño”.

En investigaciones previas, Malhotra descubrió cuál debió ser ese mecanismo. Hacia el final de su formación, Júpiter y los otros planetas gigantes gaseosos exteriores barrieron los escombros planetarios que se encontraban más lejos en el sistema solar, la región del Cinturón de Kuiper. Al eliminar los restos de polvo y trozos que quedaron de la formación del sistema solar exterior, Júpiter (especialmente) perdió energía orbital y se movió hacia adentro, más cerca del Sol. Esta migración aumentó la influencia gravitatoria de Júpiter sobre el cinturón de asteroides, lanzándolos (sin importar su tamaño) hacia el sistema solar interior.

La evidencia de que asteroides del cinturón principal aporrearon al sistema solar interior confirma un análisis cosmoquímico publicado previamente por el científico planetario de la Universidad de Arizona David A. Kring y sus colegas.

“La distribución de tamaños de los cráteres de impacto en las antiguas tierras altas de la Luna y de Marte es una comprobación completamente independiente del cataclismo del sistema solar interior y confirma nuestra evidencia cosmoquímica de una fuente asteroidal”, dijo Kring, uno de los co-autores del artículo de Science.

Kring formaba parte del equipo que antes había utilizado una técnica de datación de argón-argón para analizar las edades de fusión por impacto de los meteoritos lunares (rocas eyectadas al azar desde la superficie lunar y que llegaron a la Tierra después de permanecer en el espacio durante un millón de años o algo así).

Descubrieron, a partir de las edades de los “clastos” (fragmentos de roca fundida) en los meteoritos de breccia que toda la Luna fue bombardeada hace 3 900 millones de años, un verdadero cataclismo lunar. El análisis de las muestras lunares de Apolo nos dijo que los asteroides son la causa de al menos el 80% de los impactos lunares.

Los cometas han jugado un papel relativamente menor en los impactos del sistema solar interior, según concluyen Strom, Malhotra y Kring a partir de su trabajo. Contrariamente a la creencia popular, probablemente no más del 10% del agua de la Tierra provino de los cometas, dijo Strom.

Después del Bombardeo Pesado Tardío, las superficies terrestres estaban tan completamente alteradas que utilizando el registro de cráteres no se puede fechar ninguna de ellas que tenga más de 3 900 millones de años de edad. Rocas y minerales más antiguos se encuentran en la Luna y en la Tierra, pero son únicamente fragmentos de superficies más antiguas que fueron destrozadas por los impactos, comentaron los investigadores.

Strom dijo que si la Tierra tuvo océanos hace entre 4 400 y 4 000 millones de años, como sugieren otras evidencias geológicas, los mismos deber haber sido vaporizados por los impactos asteroidales durante el cataclismo.

Strom también ha desarrollado una hipótesis que sugiere que los eventos de impacto ocurridos durante el Bombardeo Pesado Tardío generaron enormes sistemas hidrotermales sub-superficiales que resultaron ser críticos para el desarrollo primitivo de la vida. Estimó que el cataclismo del sistema solar interior produjo más de veinte mil cráteres de entre diez a cien kilómetros de diámetro en la Tierra.

La dinámica de la formación de cráteres en el sistema solar interior cambió dramáticamente luego del Bombardeo Pesado Tardío. Desde ahí en más, el registro de cráteres de impacto refleja que la mayoría de los objetos que chocaron contra las superficies del sistema solar interior han sido asteroides cercanos a la Tierra, objetos más pequeños del cinturón principal que han sido lanzados hacia órbitas que cruzan las terrestres por medio de un fenómeno de selección por tamaño conocido como “efecto Yarkovsky”.

Este efecto tiene que ver con la forma en que los asteroides absorben y re-irradian desigualmente la energía solar. A lo largo de decenas de millones de años, el efecto es lo suficientemente fuerte como para empujar a los asteroides de menos de 20 kilómetros de diámetro a través de las resonancias jovianas que los lanzan hacia órbitas que cruzan las terrestres. Cuanto más pequeño sea el asteroide, mas fuerte es la influencia del efecto Yarkovsky.

Los geólogos planetarios han intentado contar los cráteres y su distribución por tamaño para obtener edades absolutas de las superficies de planetas y lunas.

“Pero hasta que conocimos el origen de los proyectiles, ha habido tanta incertidumbre que pensaba que nos podía llevar a un error enorme”, dijo Strom. “Pero ahora estoy en lo cierto. Por ejemplo, los investigadores han basado la historia de Marte en el registro de cráteres del bombardeo pesado, y está equivocado porque están utilizando únicamente una curva para la formación de cráteres, no dos”.

Los intentos de fechar los cuerpos del sistema solar exterior utilizando el registro de cráteres del sistema solar interior está completamente equivocado, dijo Strom. Pero sería posible fechar más adecuadamente las superficies del sistema solar interior una vez que los investigadores determinen la tasa de formación de cráteres debida al bombardeo de los asteroides cercanos a la Tierra, agregó.

Los autores del artículo de Science son Strom, Malhotra y Kring del Laboratorio Lunar y Planetario de la Universidad de Arizona, y Takashi Ito y Fumi Yoshida del Observatorio Astronómico Nacional, Tokio, Japón.

19 de junio de 2009

Agujeros negros


Muchas historias se han narrado acerca de estos oscuros cuerpos que se hallan en el espacio, se rumorea que son puertas a otros mundos, otras dimensiones o incluso que permiten viajar en el tiempo.

¿Qué es un agujero negro?
Un agujero negro es una estrella con una gran masa... pero, lo extraño es que si realmente se trata de una estrella, ¿por que es negra? Esto se debe a la gran masa que posee, la cantidad de masa con la que está formada un cuerpo determina la fuerza de gravedad que este cuerpo generará, los agujeros negros poseen una gran fuerza de gravedad y es por ello que ni siquiera la luz que irradia como estrella puede escapar, al no irradiar luz alguna se ve como un cuerpo oscuro.


¿Cómo nacen los agujeros negros?
El nacimiento de un agujero negro está relacionado con el destino de las estrellas...
El ciclo de vida de una estrella es el siguiente:

1ro: La estrella nace de un cumulo de polvo espacial, hidrógeno y helio.
2do: La estrella consume sus recursos de Hidrógeno y Helio para emanar luz y calor.
3ro: Conforme se va acercando su final, la estrella consume sus últimas reservas de Helio por lo que empieza a crecer en tamaño y obtiene una coloración roja (Gigante Roja).

La siguiente etapa será la que determinará el destino final de la estrella, esto dependerá de la cantidad de masa que contenga...

- Menor a 6 masas solares:
La estrella se irá apagando hasta convertirse en una enana blanca (estrella muy pequeña que emana poca luz y calor) y posteriormente en una enana negra.

- De 6 a 40 masas solares:
La estrella explotará y se converitrá en una Super Nova, luego de que la Super Nova se extinga quedará en el centro una estrella de neutrones (estrella caracterizada por una gran fuerza de gravedad

- Mayor de 40 masas solares:
La estrella explotará y se converitrá en una Super Nova, luego de que la Super Nova se vaya extinguiendo, la masa restante se compactará cada vez más debido a la cantidad de fuerza de gravedad generada por su cantidad de masa, convirtiéndose en un agujero negro.

¿Cómo pueden observarse los agujeros negros?

Los agujeros negros tienen masa, la cual produce una fuerza gravitacional que afecta a objetos cercanos. La fuerza gravitacional debe ser muy intensa cerca de los agujeros negros, y podrían verse los efectos en su ambiente. El material que cae dentro del agujero negro, y sería aplastado y calentado al tratar de colarse en la pequeña garganta del agujero negro, por lo que produciría rayos-X. El primer ejemplo de un agujero negro fue descubierto precisamente por ese efecto gravitacional en una estrella acompañante, en 1971.